
El pasado mes de julio se publicó en la revista Biology Letters el descubrimiento de una nueva especie de reptil marino, Paludidraco multidentatus. Los responsables de dicho descubrimiento fueron los investigadores Carlos de Miguel Chaves, Francisco Ortega y Adán Pérez García, miembros del Grupo de Biología Evolutiva de la UNED (Universidad Nacional de Educación a Distancia). La nueva especie fue bautizada como dragón de pantano (del latín «paludes», pantano, y «draco», dragón) debido a la ubicación en la que fue hallado: el pantano de El Atance, Guadalajara. El equipo estudió el esqueleto relativamente completo de dos individuos de la especie procedentes de dos excavaciones realizadas en 2008 y 2015. Paludidraco habitó durante el Triásico superior, hace unos 230 millones de años, los fondos marinos de lo que antaño fue el Mar de Tethys.
Paludidraco multidentatus se caracteriza fundamentalmente por su mandíbula, ya que presenta una configuración nunca antes vista en sauropterigios, un grupo de reptiles marinos. Esta mandíbula es frágil y delgada, con un gran número de dientes curvos y comprimidos y sin una sínfisis reforzada. Con estas características, unidas a la presencia de costillas robustas, se llegó a la conclusión de que Paludidraco probablemente no era un depredador activo como sus coetáneos ya que su estructura craneal y post-craneal le habrían impedido capturar presas. Los autores propusieron que Paludidraco podría haber sido parcialmente filtrador, aun cuando no tuviera las características óseas propias de los vertebrados marinos filtradores como las ballenas. Aunque la filtración como método de alimentación no es común en los sauropterigios, algunas especies como Henodus chelyops o Atopodentatus unicus se han interpretado como posibles filtradores. «Como resultado de esta investigación proponemos que los dientes de pequeño tamaño de Paludidraco formarían una especie de empalizada que funcionaría como tamiz, permitiéndole filtrar el alimento y expulsar el agua sobrante», señala Francisco Ortega.

La interpretación ecológica final que da el grupo de investigación en el artículo científico a Paludidraco es que podría haberse alimentado tanto de material vegetal como de pequeños animales del sustrato marino. En ambas circunstancias tragaría la comida y el agua del fondo, pero anteriormente lo filtraría con una estructura dental a modo de peine. Este modo de alimentación sería similar al de los mamíferos marinos actuales como los sirénidos, es decir, nadar lentamente cerca del fondo marino de aguas poco profundas en busca de material vegetal y animal blando. «Este peculiar reptil se desplazaría por aguas marinas costeras tranquilas y poco profundas, recorriendo lentamente el fondo en busca de pequeños animales en el sustrato o, como en el caso de los actuales manatíes, de materia vegetal», resume Ortega.
Paludidraco pertenece al grupo de los simosáuridos, grupo hermano de los populares notosáuridos que incluye animales tan conocidos como los notosaurios. Hasta ahora, el grupo de los simosáuridos estaba representado por una única especie, Simosaurus gaillardoti. S. gaillardoti sí que fue un depredador activo con dientes cónicos a diferencia de Paludidraco y se piensa que su dieta se basaba en animales duros o con concha, lo que pone de manifiesto la rareza ecológica de Paludidraco entre los reptiles marinos. «Es un nicho ecológico, un modo de vida, análogo al de los manatíes que no se había visto en ningún reptil marino. La combinación exclusiva de este esqueleto post-craneal con este modo de alimentación es único», concluye Carlos de Miguel.
En el siguiente enlace podéis leer la entrevista que el diario digital Henares al día hizo al grupo de investigación. Por último, también os dejamos las cuentas de Twitter de los tres investigadores del estudio: Carlos de Miguel, Francisco Ortega y Adán Pérez.

Referencias:
1. Carlos de Miguel Chaves, Francisco Ortega y Adán Pérez-García (2018). New highly pachyostotic nothosauroid interpreted as a filter-feeding Triassic marine reptile. Biology Letters, 14 (8): 10.1098/rsbl.2018.0130
2. Grupo de Biología Evolutiva de la UNED. Investigadores de la UNED descubren un nuevo reptil marino que vivió en la actual Guadalajara hace 230 millones de años. UNED (31 julio 2018). Disponible en: http://portal.uned.es/portal/page?_pageid=93,34668376&_dad=portal&_schema=PORTAL&id_noticia=1968
3. Julio Martínez. El Atance tuvo su dragón del pantano. Henares al día (9 agosto 2018). Disponible en: http://henaresaldia.com/atance-tuvo-dragon-del-pantano/
Recursos: La imagen de portada es obra de Eloy Manzanero y Natalia Pérez. La fotografía del yacimiento donde se encontró la especie se ha extraído del Twitter de Francisco Ortega. La reconstrucción de Paludidraco multidentatus es obra de Carlos de Miguel Chaves.
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